¿Alguna vez has pensado en cultivar amapolas en tu jardín? Estas hermosas flores se pueden ver en muchos lugares de España. El característico color rojo tiñe campos enteros. Si nos gustan, ¿por qué no disfrutarlos en casa? Para ello es fundamental que sepamos como sembrar semillas de amapola
En este artículo no solo explicaremos paso a paso cómo hacerlo, sino que también comentaremos cuándo es el mejor momento para realizar esta tarea. también diremos ¿Para qué se pueden utilizar las semillas de amapola?
¿Cuándo se siembran las semillas de amapola?
Antes de explicarte cómo sembrar semillas de amapola, sepamos cuál es el mejor momento para hacerlo. Es importante prestar atención a necesitan un período de estratificación, si no, no podrán germinar. ¿Y esto significa? Bueno, para que la germinación tenga lugar, estas semillas primero deben exponerse a las heladas y al frío.
En general, un buen momento para propagarlos es: a principios de primavera. De momento todavía es bastante probable que haya alguna que otra helada. En el caso de que vivamos en un lugar donde los veranos sean relativamente templados, lo mejor es propagar las semillas en otoño. Así nos aseguramos de que estén bien expuestas a las bajas temperaturas antes de que comience la época de germinación.
¿Cuánto tarda en germinar una semilla de amapola?
Otra cuestión que también nos interesa mucho cuando nos planteamos plantar una hortaliza es cuánto tarda en germinar. En el caso de las amapolas, si la plantación se ha realizado correctamente y ha sufrido alguna helada, El tiempo de germinación normalmente oscila entre dos y cuatro semanas. El tiempo que tardan en germinar depende de la variedad y las condiciones ambientales.
¿Sembrar semillas de amapola paso a paso?
Ahora que sabemos cuándo sembrar semillas de amapola, analicemos cómo hacerlo. Se puede decir que estas flores no toleran muy bien los trasplantes. Por esta razón, siempre es mejor sembrarlas a partir de semillas, en lugar de comprar plántulas que ya hayan germinado. Las semillas de amapola comunes generalmente se pueden comprar en cualquier tienda de artículos de jardinería. Ahora veamos cómo plantarlos paso a paso:
- Elija el sitio de plantación: La gran mayoría de las variedades de amapola prefieren pleno sol, por lo que cualquier lugar con poca sombra funcionará bien. También hay que tener en cuenta la calidad del suelo. Muchas variedades de esta flor crecen bien en terrenos áridos y rocosos, pero otras requieren un suelo rico. A este último le tendremos que dar algo de abono.
- Afloje el suelo: Una vez que hemos elegido la ubicación, necesitamos aflojar la tierra. Para sembrar semillas de amapola no es necesario hacer agujeros, simplemente se esparcen por la superficie. A la hora de preparar la tierra, basta con aflojarla un poco con un rastrillo, no más de dos centímetros y medio. Si aramos demasiado la tierra, la planta tendrá más dificultades para crecer.
- Esparce las semillas: Con la tierra recién removida, es hora de esparcir las semillas sobre ella. Las amapolas silvestres dejan caer sus semillas y el viento las dispersa bien. Así que solo tenemos que dejarlos donde caen.
- Regar: Finalmente, todo lo que tenemos que hacer es agua. La mejor manera de hacer esto es simular la lluvia. Es importante mantener húmeda la zona donde plantamos las amapolas, pero sin encharcarla.
Cuidados después de plantar
Después de sembrar las semillas de amapola, es fundamental darles ciertos cuidados para que crezcan y se desarrollen bien. En primer lugar es muy importante diluir las amapolas. De esta manera les ayudamos a crecer y producir más flores. Es una tarea sencilla si cortas la parte superior de la planta con unas tijeras desinfectadas, para que no molestemos las raíces de las otras amapolas. Siempre que veamos plántulas, podemos retirarlas para que las flores tengan más espacio para crecer. El espacio que debe haber entre cada ejemplar depende de la variedad de amapola. Si bien es cierto que esto no es imprescindible, sí beneficia a las flores y al aspecto de la plantación.
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Otro aspecto fundamental para el correcto cuidado de las amapolas después de la siembra es: Recorte las flores a medida que comienzan a florecer. Así podremos mantener activa la floración de nuestras amapolas. Por supuesto, debemos dejar que formen sus vainas de semillas en el verano. Cuando esto sucede, las flores se caen, pero las vainas todavía están en el tallo. Si queremos, podemos cosechar las semillas y volver a sembrar en la próxima temporada. Una vez que hayamos plantado amapolas con semillas comestibles, podremos usarlas en la cocina.
Por supuesto, no debemos olvidarnos del riego. Esto debe moderarse una vez que las amapolas ya estén establecidas. La mayoría de las variedades no necesitan mucha agua una vez que han crecido. Es más: El exceso de agua puede causar un crecimiento excesivo del tallo, dándole un aspecto poco atractivo. Por lo tanto, las reglas para regar amapolas son las siguientes:
- Antes y durante la floración: Regar moderadamente y con cierta regularidad.
- Después del período de floración: Solo riegue cuando el suelo se haya secado.
Uso de semillas de amapola
Las semillas de amapola se utilizan principalmente para: plantar más flores, hacer infusiones y en la panadería y repostería. Su consumo es muy saludable, ya que contienen calcio, ácidos grasos insaturados y antioxidantes. Así, las decocciones elaboradas con estas semillas pueden tener un efecto relajante, lo que ayuda en momentos de ansiedad. Además, alivia la mucosidad cuando tenemos tos o resfriado.
En el ámbito culinario es más habitual utilizar semillas de amapola para hacer masa para galletas, bollos, pasteles y pan. Si bien es cierto que aquí en España no se ven mucho, sí se utilizan mucho con estos fines en otros países europeos como Alemania.
Así que ya lo sabes: si te animas a cultivar amapolas, puedes buscar en internet recetas con estas deliciosas semillas. Pero cuidado, no todas las variedades de amapola dan semillas comestibles.
Gracias por leer bosquevirgen.com. ¡Hasta pronto!