Una de las flores más cultivadas del mundo es, por supuesto, la rosa. No solo eso, también es uno de los favoritos. Por lo tanto, no es de extrañar que muchas personas estén interesadas en cultivar esta planta y disfrutar de su belleza e increíble fragancia. curioso, la mayoría de los rosales que vemos suelen ser injertados. Puede resultar un poco chocante al principio, pero aporta beneficios realmente importantes a estas plantas. Pero, ¿cómo injertar rosas?
Ahora puede ser muy interesante para usted saber por qué el injerto es una técnica tan común y beneficiosa para estas preciosas flores. Pues te aconsejo que sigas leyendo, porque te lo comentamos y te explicamos paso a paso cómo injertar rosas.
¿Qué es el injerto de rosas?
Antes de explicar cómo injertar rosas, vamos a explicar en qué consiste esta práctica. Es una técnica bastante sencilla que se utiliza mayoritariamente tanto en jardinería profesional como doméstica. El objetivo es unir dos fábricas para obtener ciertos beneficios. Para conseguirlo, es importante saber en qué consiste un injerto y cómo hacerlo correctamente.
¿Cuándo es el mejor momento para injertar rosales?
Aunque injertar rosas es una práctica habitual, hay que tener en cuenta que también provoca daños en la planta. Por eso es muy importante no hacerlo cuando nos apetezca, si no en una época del año en que el rosal aguanta mejor y el esqueje arraiga bien. Por lo que no solo es fundamental saber cómo injertar rosas, sino también cuándo hacerlo.
En general, el verano y la primavera son las mejores estaciones del año para hacer un injerto. Es importante saber que una de las claves más importantes para que un injerto arraigue bien es que: la savia perteneciente a la planta debe estar en circulación. En el caso de que pospongamos esta tarea hasta el otoño, por culpa de las heladas tendremos que tener mucho más cuidado.
Además de la época del año, hay otro aspecto a tener en cuenta para saber cuál es la mejor época para injertar rosales. El mejor es espere hasta que haya pasado una semana desde que la flor se haya marchitado. Esto es fundamental, ya que los cogollos que usaremos para el injerto se tomarán de los tallos de las flores.
Injertar rosas paso a paso
Para aprender a injertar rosas, primero debemos entender completamente lo que implica esta técnica. En general, el injerto es una técnica común para propagar plantas leñosas. Básicamente se trata de unir dos plantas diferentes para que finalmente crezcan como si fueran una sola verdura. ¿Pero para qué es esto? ¿Qué beneficios tiene para las plantas? Bueno, a través de esta fusión única de diferentes especies de plantas, obtenemos ambos son más resistentes a diversos factores meteorológicos, plagas y sequías.
Concretamente en el rosal, no sólo es una técnica muy popular por los beneficios que acabamos de mencionar, sino también también mejora tanto la calidad como la calidad de las flores. Esto hace que las rosas sean más ligeras, más duraderas y más fragantes. Estas son solo algunas de las razones por las que esta técnica se ha utilizado durante muchos años.
Ahora estamos listos para aprender a injertar rosas paso a paso. A pesar de ser una tarea bastante sencilla, es necesario conocerla a fondo para poder realizarla con éxito.
1. Agua para la inoculación
Si bien puede parecer básico, vale la pena recordarlo. Es importante que mantengamos la planta bien hidratada unos días antes del injerto. Este pequeño detalle jugará a nuestro favor. Así, el rosal estará bien nutrido y en perfectas condiciones para poder pasar por esta técnica. Eso sí, el mismo día que vamos a injertar el rosal lo mejor es suspender el riego.
2. Herramientas: Selección y Desinfección
Tanto la selección como la desinfección de las herramientas son de suma importancia. para hacer un injerto y podar las hortalizas correctamente. Antes de comenzar cualquiera de estas dos prácticas, asegúrese de que la hoja de poda y las tijeras estén debidamente esterilizadas y libres de óxido. Además, debemos asegurarnos de que estén bien afilados para que puedan cortar a la perfección, ya que el punto es que el filo quede lo más limpio posible. De esta forma minimizamos el daño a la planta.
Artículo relacionado:
¿Cuándo se podan los rosales?
3. Preparación del portainjertos para su fijación a la yema
¿Qué entendemos por patrón? Esta es la planta que eventualmente soportará el injerto. Para seleccionar la verdura adecuada para desempeñar este papel, lo mejor es: elige la planta que esté mejor enraizada y sea más resistente que las demás.
Al injertar una rosa, la fórmula más común es el llamado «injerto de refuerzo». Se basa en hacer una incisión en el tronco central del rosal. Este corte debe ser en forma de T y también de T invertida. Pero cuidado, no debemos profundizar demasiado en el tallo para no dañarlo demasiado, basta con cortar la corteza. Si nos pasamos de la raya, también puede pasar que el cogollo no quede bien injertado.
Una vez que tenemos la T lista, es el momento de poner la yema. Para ello, debemos quitar un poco de la madera exterior con un bisel y colocarla en la incisión del tallo central de la planta que hemos elegido como patrón. El objetivo es que haya un pequeño abrazo a través de la corteza del tallo. Luego tenemos que tapar la zona del injerto y presionar un poco para ayudar a la unión. Para facilitar esta tarea, podemos utilizar rafia, un trozo de manta de jardín o incluso film transparente.
Finalmente, solo queda esperar a que la naturaleza actúe por sí sola. Si nuestra técnica ha tenido éxito, tendremos la suerte de ver cómo el tallo que le colocamos comenzará a brotar, y así nacerá otro y único rosal.
Gracias por leer bosquevirgen.com. ¡Hasta pronto!